Cómo proteger mi negocio de robos

Teniendo en cuenta los devastadores efectos económicos de la crisis sanitaria del COVID-19, es probable que muchas pymes y comercios no hagan vacaciones o bien, se cojan menos días de los habituales. En caso de hacerlas, es importante que tengáis en cuenta toda una serie de consejos para que vuestros negocios sean menos vulnerables ante posibles robos.

Como sabemos, los ladrones aprovechan para acceder y hacerse con objetos de valor, mercancías o dinero en efectivo. Pero, es que aparte de lo que sustraen, un robo también puede conllevar importantes destrozos en el local. En muchos casos se deben reparar las ventanas, puertas forzadas, mobiliario roto... Lo cual implica un sobrecoste económico de importantes dimensiones.

Como nos podemos imaginar, el verano es la época del año preferida para los ladrones. En cuanto a los días de la semana: los lunes, martes y jueves -entre la 1 y las 4 de la madrugada-, son sus momentos favoritos para actuar.

Cómo evitar los atracos

Ahora bien, si queréis minimizar este riesgo, os recomendamos toda una serie de medidas, para que reforcéis la seguridad de vuestra empresa durante el periodo estival:

• Métodos para disuadir a los ladrones. En el mercado podéis encontrar varios dispositivos de seguridad para cubrir cualquier necesidad. Nos referimos a alarmas conectadas a centrales, cámaras, barrotes, cristales de seguridad, persianas metálicas, cerraduras invisibles, detectores de largo alcance..., son elementos que retrasan y disuaden un intento de robo.

• Un clásico entre los clásicos: la alarma. Si la utilizáis correctamente, os puede ayudar y mucho. Por ejemplo, para evitar que se active cuando no toca y mejorar la seguridad, especialmente en empresas más grandes, os recomendamos que no conectéis la alarma hasta que todo el personal se haya ido. También que nadie entre en la instalación hasta haber desconectado la alarma y por último, es preferible que se realicen los trabajos de limpieza y mantenimiento en horario laboral.

• No anunciéis que os vais. Debéis evitar poner carteles del tipo: "estamos de vacaciones". Tampoco lo pongáis en las redes sociales ni anunciad las fechas que cerraréis. Recordad no dejar el género o el escaparate a la vista. También, si contáis con una persona de confianza, le podéis pedir que os haga el favor de ir recogiendo el correo del buzón.

• Mucho cuidado en el momento de hacer caja. Una precaución que debéis tener en cuenta durante todo el año; pues, se trata de uno de los momentos más peligrosos de la jornada. El cierre, cuando se hace la recaudación de la caja y la apertura del establecimiento son los momentos más delicados para los trabajadores y el negocio. Precisamente, porque es cuando los ladrones están más pendientes, sobre todo en negocios pequeños. Por ello, os recomendamos que en el local sólo conservéis una cantidad mínima de dinero en efectivo. A medida que se vaya acumulando, lo mejor es llevar el dinero a una entidad financiera o guardarlo en una caja fuerte. Además, aseguraros de que al abrir y cerrar el establecimiento no hay ningún desconocido observándoos.

Aparte de aplicar estos consejos, desde CSA os recomendamos que reviséis vuestro seguro del negocio, ya que cubre todo el año los robos que pueda tener la empresa. Para evitar problemas a la hora del siniestro, debéis comprobar que las medidas de protección que constan sean las reales: alarma conectada, puerta con rejas, cerradura de seguridad, etc.

De este modo, podréis marchar tranquilos de vacaciones, aunque sólo sean unos días. Si tenéis dudas; poneros en contacto con nosotros y os informaremos de las mejores opciones para vuestro negocio.